"LA FELICIDAD ABSOLUTA NO EXISTE, Y UNO ESCRIBE JUSTAMENTE POR ESO"

domingo, 4 de septiembre de 2011

El sueño. Por Carlos Rafael Landi.


Me di cuenta de que había sido sólo un sueño; sin embargo, no por ello me resultó agradable.

Desde esa noche lo único que ansío es despertar..., ¡pero aún no ha podido ser!
¡Al contrario, he descubierto que soy un habitante de este terrible mundo onírico! Aquella primera noche dejó paso al amanecer, y caminé sin rumbo por el solitario terreno pantanoso.

Cuando llegó la noche aún seguía vagando, esperando despertar. Pero de repente aparté la maleza y vi ante mí el viejo castillo... ¡A su lado había un ser de rostro fantasmal que alzaba la cabeza y aullaba extrañamente a la luz de la luna!
Todos los días sucede lo mismo. La noche me toma como siempre en ese lugar desconocido. He intentado no moverme cuando sale la luna, pero debo caminar en mis sueños, porque despierto con el ser aterrador aullando ante mí a la brillante luna; entonces doy media vuelta, y empiezo a correr desesperadamente.
¿Cuándo despertaré?

No hay comentarios:

Publicar un comentario